DESDE ARGENTINA
En el corazón de los Balcanes, encajada entre Croacia y Serbia, Bosnia y Herzegovina ha sido durante dos mil años punto de encuentro entre Oriente y Occidente. Aquí, la cultura bizantina se fundió con la Roma católica hasta que el poder turco se impuso en el siglo XV. Esta historia única ha formado una de las culturas más fascinantes de Europa, con una heterogénea población de croatas, serbios y eslavos convertidos al Islam compartiendo un mismo espacio.
Bosnia-Herzegovina atrae al turista con su diversidad de culturas y paisajes naturales: montañas, balnearios y fuentes termales y hermosas bahías. El Santuario de la Virgen de Medjugorje convoca a fieles de todo el mundo año tras año.
El clima de Bosnia-Herzegovina es continental con influencias mediterráneas en las zonas más cercanas a la costa, se caracteriza por veranos cálidos e inviernos fríos y nevados, las diferencias de las temperaturas son altas y abundantes las precipitaciones. En la capital, Sarajevo, las temperaturas en enero oscilan entre un promedio mínimo de -4°C y un promedio máximo de 3°C, mientras que en agosto las temperaturas oscilan entre un promedio de temperatura máxima de 26°C y una media de temperatura mínima de 13°C. La mejor época para viajar a Bosnia y Herzegovina son los meses de primavera y verano, entre mayo y agosto.
Vestimenta
En invierno, se recomienda llevar ropa de abrigo. En verano, lo normal es llevar ropa ligera y algo de abrigo en la zona del norte, que suele ser más húmeda y fría.